Es evidente que una vida en la que hay resentimientos profundos sólo conduce a la futileza y a la infelicidad… Pero con el alcohólico, cuya esperanza es el mantenimiento y el desarrollo de una experiencia espiritual, este asunto de los resentimientos es infinitamente grave.
ALCOHOLICOS ANONIMOS, pp 61, 62
Conoce a Dios;
Conoce la Paz.
No hay Dios,
No hay Paz.
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