“Años de convivencia con un alcohólico pueden volver neuróticos a cualquier esposa o niño. Toda la familia está enferma hasta cierto grado.”
ALCOHOLICOS ANONIMOS, p. 114
Para mí es importante reconocer que, como alcohólico, hago daño no sólo a mí mismo, sino también a los que me rodean. Hacer reparaciones a mi familia y las familias del alcohólicos que todavía sufren, será siempre muy importante. Darme cuenta del desastre que yo creé y tratar de reparar la destrucción será un trabajo para toda mi vida. El ejemplo de mi sobriedad puede dar a otros, esperanza y fe para que se ayuden a sí mismos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario