Podemos poner en nuestras, algunas veces, maltrechas relaciones familiares el mismo cariño y tolerancia que ponemos en nuestro Grupo de A. A.?
DOCE PASOS Y DOCE TRADICIONES, p. 132
Los miembros de mi familia sufren los efectos de mi enfermedad. Amarlos y aceptarlos como ellos son, tal como amo y acepto a los miembros de A. A., hace retornar el amor, la tolerancia y la armonía a mi vida. Ser cortés y respetar las fronteras personales son prácticas necesarias en todos los aspectos de mi vida.
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