miércoles, 30 de octubre de 2013

VIVE Y DEJA VIVIR

Desde su fundación, los alcohólicos anónimos nunca se han visto divididos por ninguna polémica de alguna importancia. Tampoco ha terciado nuestra Sociedad alguna vez en controversias mundanas. Eso, sin embargo, no ha sido una virtud adquirida a fuerza de trabajo. Podría decirse que nacimos con ella…”Así que como no discutimos esos asuntos ni en privado, cae por su propio peso que nunca lo haremos en público.”


DOCE PASOS Y DOCE TRADICIONES, p. 217



¿Recuerdo yo que tengo el derecho a mi opinión pero que otros no tienen que estar de acuerdo? Éste es el espíritu de “Vive y Deja Vivir.” La oración de la serenidad me recuerda, con la ayuda de Dios, “aceptar las cosas que no puedo cambiar.” ¿Estoy todavía tratando de cambiar a otros? Cuando se trata de “valor para cambiar las cosas que puedo”, ¿recuerdo que mis opiniones son mías y que las tuyas son tuyas? ¿Estoy todavía temeroso de ser quien soy? Cuando se trata de “sabiduría para reconocer la diferencia”, ¿recuerdo que mis opiniones vienen de mi experiencia? Si tengo la actitud de “un sabelotodo”, ¿no estoy siendo deliberadamente polémico?

1 comentario:

  1. Yo no solo quiero esas respuestas... las necesito... y ya las veo venir.

    ResponderEliminar